Realizar un recorrido sensorial por el aula con objetos que produzcan sonidos (campanas, papel crujiente, castañuelas).
Escuchar y describir los sonidos, relacionándolos con palabras o refranes que puedan rimar o imitar los sonidos (ejemplo: "Cae la lluvia, moja la prenda", acompañando con sonidos de lluvia).
Presentar una selección de refranes y pedir a los niños que los repitan, identifiquen las rimas y los sonidos destacados.
Comprensión y producción
Crear un "Libro de sonidos y refranes": los niños ilustran y escriben refranes que rimen o tengan elementos sonoros, usando tarjetas o materiales manipulables.
Juegos de dramatización donde representen refranes con efectos de sonidos (ejemplo: usar campanas o silbidos para representar animales o acciones).
Organizar un taller de creación de juegos de palabras con calambures y onomatopeyas, usando recursos visuales y objetos reales (ejemplo: "El perro que ladra, la campana que suena").
Reconocimiento
Realizar una actividad de "Detectives de sonidos": escuchar grabaciones o sonidos del entorno y buscar refranes o palabras relacionadas.
Reflexionar en grupo sobre qué elementos sonoros identificaron y qué mensaje transmiten los refranes creados.
Corrección
Revisar los refranes y juegos creados, destacando los elementos sonoros y la coherencia en el mensaje.
Sugerir mejoras o nuevas ideas para enriquecer los refranes, fomentando la colaboración y la creatividad.