Iniciar con una actividad lúdica: "El ritmo de mis emociones", usando instrumentos hechos con materiales reciclados (botellas, cucharas, tapas) para explorar diferentes ritmos que representen emociones.
Escuchar ejemplos de canciones cortas y analizar qué palabras y sonidos usan para expresar sentimientos (ej. "La vaca Lola", "Estrellita").
Invitar a los niños a compartir una vivencia y convertirla en una frase sencilla.
Comprensión y Producción
Guiar un ejercicio de creación de letras sencillas, usando palabras que expresen emociones. Ejemplo: "Estoy feliz cuando...", "Me siento triste porque...".
Utilizar tarjetas con palabras o frases que puedan combinarse para formar versos.
Practicar la melodía y el ritmo con la ayuda de instrumentos simples o palmadas.
Grabar en audio o vídeo a los niños interpretando sus letras.
Reconocimiento
Organizar una pequeña muestra donde cada grupo comparta su canción o verso, resaltando la creatividad y las emociones expresadas.
Hacer una lluvia de ideas sobre lo que aprendieron y lo que les gustaría mejorar.
Corrección
Revisar en conjunto las canciones, haciendo sugerencias amables para mejorar la letra, la entonación o el ritmo.
Ajustar las canciones según las ideas y el tiempo disponible, fomentando la cooperación.
Fase 3: Intervención
Nombre del Momento
Actividades Sugeridas
Integración
Ensayar las canciones en grupo, coordinando voces y ritmo.
Crear un cancionero ilustrado con las letras y dibujos realizados por los niños.
Preparar una presentación en la escuela o en un espacio comunitario para compartir sus creaciones.
Difusión
Organizar un "mini concierto" donde los niños interpreten sus canciones ante sus compañeros, profesores y familiares.
Grabar la presentación para compartir en la comunidad escolar o en redes internas.
Consideraciones
Reflexionar en grupo sobre qué aprendieron, qué les gustó y qué les fue difícil.
Dialogar sobre la importancia de expresar emociones a través de la música y el arte.
Avances
Evaluar si los niños lograron crear una canción que exprese una emoción o vivencia personal.
Revisar el cancionero y las grabaciones como evidencias del proceso y los logros.
Planear posibles próximos pasos, como componer nuevas canciones o realizar actividades musicales similares.