Planeación Didáctica de Primer Grado
Nombre del Proyecto: Del huerto a la mesa, una vida saludable rinde frutos en la educación
Asunto o Problema Principal a Abordar: Que los niños comprendan la importancia de alimentarse bien para mejorar su bienestar y rendimiento escolar.
Tipo de Planeación: Semanal (5 días)
Escenario: Aula, escuela y comunidad
Metodología(s): Basada en problemas, aprendizaje activo y participativo
Ejes Articuladores: Inclusión, Interculturalidad crítica, Vida saludable, Pensamiento crítico
Contenidos y PDAs Seleccionados
Saberes y Pensamiento Científico (Contenidos):
- Beneficios del consumo de alimentos saludables, agua potable y la práctica de actividad física.
Saberes y Pensamiento Científico (PDA):
- Identifica actividades personales, familiares y comunitarias que impactan en la naturaleza y la salud, las registra y clasifica como positivas o negativas.
Desarrollo de la Planeación Semanal (5 Días)
Lunes
Inicio:
- Actividad 1: Cuentacuentos interactivo sobre una abuela que cultiva verduras en su huerto y las comparte en su comunidad. Se invita a los niños a imaginar qué alimentos saludables conocen y usan en su casa.
- Actividad 2: Pregunta motivadora: “¿Qué comida saludable les gusta y por qué?” Los niños comparten en círculo, promoviendo la expresión oral y el respeto por las ideas de sus compañeros.
Desarrollo:
- Actividad 3: Juego manipulativo “El camino del alimento”: con figuras de frutas, verduras, agua y actividades físicas, los niños siguen un recorrido en el aula o en el patio, colocando cada elemento en su lugar y discutiendo sus beneficios (Fuente: Libro, Pág. 45).
- Actividad 4: Dibujan en una cartulina su plato saludable, seleccionando alimentos que les gustan y que saben que los hacen fuertes y felices. Se promueve la reflexión sobre la alimentación balanceada.
Cierre:
- Compartir en círculo las ideas principales del día y una canción sobre comer frutas y verduras. Se invita a los niños a pensar en una actividad saludable que puedan hacer en familia.
Martes
Inicio:
- Actividad 1: Reconocimiento de conocimientos previos: mostrar imágenes de diferentes comidas y preguntar cuáles son saludables y cuáles no.
- Actividad 2: Juego de “Adivina qué es”: con ojos vendados, los niños identifican alimentos y objetos relacionados con la alimentación saludable y la actividad física.
Desarrollo:
- Actividad 3: Experimento sencillo: preparar una ensalada de frutas con ayuda de los niños. Mientras cortan y mezclan, conversan sobre los beneficios de comer varias frutas (Fuente: Libro, Pág. 50).
- Actividad 4: Video corto y atractivo sobre hábitos saludables y la importancia del agua potable. Luego, los niños dibujan su bebida favorita y la comparten.
Cierre:
- Reflexión grupal: “¿Qué aprendimos hoy para cuidarnos mejor?” y un juego de estiramiento y movimiento para promover la actividad física.
Miércoles
Inicio:
- Actividad 1: Dinámica “El árbol de los alimentos”: los niños colocan en un árbol de papel diferentes alimentos que conocen, clasificándolos en frutas, verduras, cereales, etc.
- Actividad 2: Pregunta generadora: “¿Qué pasa si no comemos bien?” Los niños expresan sus ideas y se escuchan entre todos.
Desarrollo:
- Actividad 3: Creación de un mural colaborativo “Mi semana saludable”: en el que registran acciones relacionadas con comer bien, beber agua y moverse, usando dibujos y recortes de revistas.
- Actividad 4: Juego de roles: “El supermercado saludable”, donde los niños simulan comprar alimentos y aprenden a escoger opciones nutritivas.
Cierre:
- Conversación final y reflexión en pequeños grupos: “¿Qué puedo hacer en casa para comer mejor?” Se les invita a compartir una acción concreta para la familia.
Jueves
Inicio:
- Actividad 1: Recapitulación con una rúbrica sencilla: “¿Qué aprendí sobre la comida saludable?” Los niños expresan en una escala de 1 a 3 su nivel de comprensión.
- Actividad 2: Canción o danza sobre los alimentos y la actividad física, para activar el cuerpo y reforzar el aprendizaje.
Desarrollo:
- Actividad 3: Registro gráfico: los niños hacen un dibujo de su plato ideal saludable y lo explican en pareja, fomentando la expresión oral y el pensamiento crítico.
- Actividad 4: Salida breve al patio o jardín para observar plantas, agua y movimiento, relacionando los conceptos aprendidos con su entorno cercano.
Cierre:
- Reflexión grupal: “¿Qué puedo hacer mañana para seguir cuidando mi salud?” y un momento de relajación con respiraciones profundas.
Viernes
Inicio:
- Actividad 1: Juego de revisión: “Memoria saludable” con tarjetas de alimentos, actividades y acciones positivas.
- Actividad 2: Pregunta reflexiva: “¿Qué aprendí esta semana y cómo puedo aplicarlo en mi vida diaria?”
Desarrollo:
- Actividad 3: Preparación del Producto Final: los niños crearán un cartel o una cartelera titulada “Mi vida saludable”, donde dibujarán y escribirán (con ayuda) acciones que deben seguir en casa y en la escuela.
- Actividad 4: Presentación grupal del cartel, compartiendo ideas y aprendiendo a escuchar y valorar las aportaciones de sus compañeros.
Cierre:
- Autoevaluación sencilla: los niños indican con fichas de colores qué acciones harán en su vida diaria para mantenerse saludables. Se cierra con una canción final sobre el cuidado personal y colectivo.
Producto de Desempeño Auténtico Semanal
Producto:
Un mural colaborativo titulado “Mi Vida Saludable”, donde los niños plasmaron sus ideas, acciones y compromisos para alimentarse bien, beber agua y mantenerse activos. Incluye dibujos, pequeñas frases y acciones concretas que podrán compartir con sus familias.
Criterios de evaluación:
- Participación activa en actividades y reflexiones.
- Capacidad para identificar alimentos y acciones saludables.
- Expresión oral clara y respetuosa.
- Compromiso para aplicar en casa las acciones aprendidas.
Este producto evidencia el proceso de aprendizaje, el pensamiento crítico y la participación activa, vinculando los conocimientos con su entorno familiar y comunitario.
Sugerencias de Evaluación Formativa
- Observación continua durante actividades lúdicas y participativas.
- Listas de cotejo para valorar la participación, interés y comprensión.
- Rúbricas sencillas para evaluar la expresión oral, colaboración y autoevaluación.
- Preguntas abiertas en cada día para promover la reflexión y el pensamiento crítico.
- Uso de fichas de colores para que los niños expresen su nivel de acuerdo o compromiso con lo aprendido.
Estas estrategias permiten detectar avances, dudas y promover una retroalimentación positiva y significativa.